¿Cómo actuar cuando tu hijo hace berrinches? Las rabietas forman parte de la crianza, desarrollo y comunicación de un niño. Y a menudo llegan sin previo aviso ni provocación. La mayoría de los padres reaccionan con sanciones o cediendo a las demandas del niño. Pero esto, en realidad, hace que el problema empeore con el tiempo.
¿Por qué hacen rabietas los niños?
Una rabieta es un comportamiento que el niño utiliza para intentar controlar la situación y conseguir lo que cree que se merece y otras veces, oculta otra necesidad. Aunque pueden ser muy molestas y agotadoras, en realidad son una buena oportunidad para que los padres enseñen a su hijo nuevas habilidades adecuadas.
Cuando tu hijo tiene una rabieta, probablemente está tratando de decirte algo. Lo más frecuente es que esté cansado o tenga hambre, o que quiera algo que tú no le das. O la idea de ir a algún sitio, prepararse para ir a algún sitio o hacer algo puede hacer que tu hijo tenga una rabieta. Cuando esto ocurra, intenta relajarte y mantener la calma para poder ayudarle a encontrar una forma de expresar sus sentimientos, ¡incluso si esto implica un super berrinche!
Las rabietas son una parte normal del desarrollo infantil y pueden ser manejadas por los padres. En este artículo encontrarás todo lo que necesitas saber sobre las rabietas, qué hacer cuando tu hijo tiene una y cómo prevenirlas.
Mi hijo hace berrinches muy fuertes en público.
Cuando los niños empiezan a tener rabietas en público, puede ser embarazoso para todos los implicados. Pero si no tienes cuidado en como lo tratas, puedes empeorar la situación haciendo que tenga más rabietas. Aunque te cueste tiempo y esfuerzo, hay formas de ayudar a los niños a aprender a manejar su ira de forma más adecuada en casa y fuera de ella.
Es muy importante que no lo reprendas ni castigues de ninguna forma en publico, ya que esto supone una humillación para el niño, es ese momento mejor ignóralo, o distráelo con alguna cosa o tarea, si es muy pequeño puedes llevarlo a otra zona y mostrarle otras cosas que le hagan olvidar, si es un niño más grande, mejor ignora la situación y luego habla en casa calmadamente sobre lo ocurrido.
Es muy normal que los niños de todas las edades hagan este tipo de berrinches, pero ¿Cómo saber cuando un berrinche ya no es normal? si tu hijo hace este tipo de llamados de atención muy a menudo, por decir casi a diario, quizás sufra de TDDEA (trastorno de desregulación disruptiva del estado de ánimo). Lo que recomendamos en este caso es consultar con un psicólogo infantil para que te guíe y te enseñe a equilibrar el estado de ánimo del niño de forma adecuada.
¿Cómo actuar cuando tu hijo hace berrinches?
Berrinches en niños de 1 a 2 y 3 años
Esta es la edad donde aparecen los primeros berrinches, como el niño es aun muy pequeño no sabe controlar sus emociones y su lenguaje para comunicar lo que quiere es muchas veces llorando, como cuando era un bebé más pequeño y lloraba cada vez que tenia hambre, sueño o necesitaba que le cambien el pañal.
El niño aún se expresa de esa forma, así que siempre que el niño haga una rabieta recuerda que además de estar enojado, por ejemplo, »porque le has quitado ese objeto que no puede tocar» detrás de su llanto puede estar expresando alguna necesidad, como por ejemplo estar muy cansado. Actúa con mucha paciencia, abrázalo para que equilibre sus emociones, dale un paseo en brazos y en pocos minutos se habrá olvidado de eso que le hizo enojar.
Berrinches en niños de 3 a 4 años
Por lo general los berrinches comienzan a cesar a los tres años aproximadamente, pero hay niños que llevan los berrinches durante toda la infancia, esto se debe a que los niños van aprendiendo poco a poco como manejar sus emociones y sobre todo la frustración, a algunos aprender a gestionar este sentimiento les lleva algo más de tiempo.
La mejor estrategia para manejar un berrinche a esta edad es tratar de disuadir o distraer al niño, primero que todo ten paciencia y deja que el niño se desahogue y exprese sus emociones, luego proponle algún plan o un juego para hacer juntos, cuando consigas que el niño haga alguna actividad, aprovecha para dialogar calmadamente sobre lo que ha sucedido y enséñale como debe pedir las cosas y a que debe al igual que mamá y papá, ser paciente y aprender a ceder cuando corresponde y esperar.
Intenta mantener la calma y hablar con voz firme a tu hijo. Puede decir algo como: «No podemos ir, es hora de dormir».
Berrinches en niños de 5 a 6 y 7 años
A esta edad, los niños suelen tener más conciencia de sus rabietas y las usan para conseguir cosas, por ejemplo, que le compres ese juguete carísimo que vio en el supermercado. En esta edad el niño ya es capaz de entender algunas pautas básicas y es un excelente momento para que con mucha paciencia, le expliques que es tipo de comportamiento es inaceptable, y más aun si lo hace en público.
El el momento en que hace el berrinche ten muchísima paciencia, no te alteres ni te frustres, mantén la calma y no cedas si crees que no corresponde, luego pasado un rato habla con el pequeño y explícale que algunas cosas las podrá tener cuando desee pero no todas, a veces mamá o papá dirá que no y que eso esta bien. Sobre todo háblale con calma y al terminar la charla dile cuanto lo amas y abrázalo.
Berrinches en niños de 8 a 10 años
A esta edad, los berrinches son mucho menos frecuentes, pero pueden ocurrir de vez en cuando, por lo general, cuando un niño de esta edad hace un berrinche o trata de llamar la atención con una explosión emocional o llanto, es porque está tratando de comunicar otra cosa.
Quizás haya otra cosa que le esta incomodando, quizás tenga problemas en la escuela, no se sienta cómodo con alguna situación especifica, este pasando por algún malestar a causa de problemas familiares, está sufriendo algún tipo de diferencia hacia el o maltrato, etc. Son muchos los motivos ocultos que puede estar tratando de expresar un niño mayor cuando hace una rabieta o tiene una explosión emocional.
Si notas este tipo de comportamiento, trata de ponerte a la altura de el y habla calmadamente, intenta que confié en ti y te cuente que cosas son las que le están incomodando y si hay algo de lo que quisiera hablar, te sorprenderías del mundo de cosas que a veces puede llegar a expresar un niño cuando logra abrirse.
Si aun así, no logras que tu niño se exprese y los berrinches severos continúan, tendrías que evaluar la posibilidad de llevar al niño a un psicólogo.
Conclusión:
Es importante comprender que los niños cuando tienen un berrinche o una crisis, no pueden en el momento manejar ni controlar sus emociones, lo único que como padres podemos hacer es tratar de llevar el momento con paciencia y comprensión y luego hablarlo cuando la tormenta ya ha pasado.
No quiere decir que se deje al niño hacer lo que quiera, se trata más bien de dejar que el niño exprese sus emociones, no ceder y luego explicar porque no se le dio lo que quería y que ese comportamiento no es aceptable, con el tiempo el niño aprenderá a pedir lo que necesita de una manera más amable y a aceptar un no como respuesta pero toma tiempo.
Como actúes tú marcará el comportamiento de tu hijo en el futuro, los niños aprenden más con el ejemplo que con las indicaciones, si tienes paciencia, el aprenderá a tener paciencia, si eres amable, aprenderá a ser amable, y así en todas las cosas. No se puede evitar los berrinches o rabietas ya que son parte del desarrollo de los niños, y cuando son pequeños, un medio de comunicación. Lo único que se puede hacer es aprender a sobrellevar el momento de la forma más armoniosa posible.
Si un niño además de hacer berrinches, golpea a los mayores o a otros niños, muerde o actúa de otras formas violentas, lo mejor es consultar con un psicólogo.
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